domingo, 7 de marzo de 2010

TEMA 10. LOS MILAGROS

EXPOSICIÓN:

Curación de un paralítico (Lucas 5, 17-26)

Un día que él estaba enseñando, estaban también allí sentados unos fariseos y unos maestros de la Ley que habían venido de todo el país, de Galilea, de Judea y de Jerusalén. Jesús, por el poder del Señor, curaba a los enfermos.

Cuando llegaron unos hombres trayendo en una camilla a un paralítico. Intentaban introducirlo para ponerlo delante de él, y no encontrando la manera de hacerlo a causa del gentío, subieron a la terraza, y lo bajaron por el techo en la camilla y lo pusieron en medio de todos, ante Jesús.

Él, viendo su fe, dijo: "Hombre, te son perdonados tus pecados."

Los maestros de la Ley y los fariseos pensaban para si y decían: "¿Quién es éste que dice blasfemias? ¿Quién puede perdonar los pecados sino sólo Dios?"



Pero Jesús, que conocía sus pensamientos, les respondió: "¿Qué juzgáis en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil decir: Te son perdonados los pecados, o bien decir: Levántate y ponte a caminar?

Pues ahora sabrán que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra de perdonar los pecados.Entonces dijo al paralítico:"Tú, levántate toma tu camilla y vete a casa. "

Al instante se levantó delante de todos, tomó la camilla donde estaba tendido y se fue a su casa alabando a Dios. Todos se quedaron atónitos, y daban gracias a Dios, llenos de reverencia, y decían: "Hoy hemos visto cosas maravillosas."

La fe del hombre ciego (L. 18, 35-43; Mt 20,29-34; Mc 10,46-52)

Cuando llegaron cerca de Jericó, junto al camino había sentado un ciego que pedía limosna. Al oír que pasaba gente preguntó qué era aquello y le dijeron que pasaba Jesús de Nazaret Entonces gritó: "Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí!".

Los que iban delante le reprendian para que callase, pero él gritaba todavía más fuerte: "Hijo de David, ten compasión de mí! Jesús se detuvo y mandó que se lo trajesen.

Cuando lo tuvo cerca le preguntó: "¿Qué quieres que haga por ti?" Él le respondió: "Señor, haz que vea." Jesús le dijo: "recobra la vista. Tu fe te ha salvado." Y al instante vio, y le seguía bendiciendo Dios. Y todo el pueblo, al ver esto, daba gloria a Dios.




Los sordos oyen y los mudos hablan (Mc 7, 31-37)

Saliendo otra vez de la región de Tiro, pasó por Sidón, hacia el lago de Galilea, atravesando la región de Decàpolis. Le llevaron, entonces, un sordo y tartamudo y le rogaron que le impusiera sus manos.

Jesús lo apartó de la gente, y a solas con él le puso los dedos en las orejas y le tocó la lengua con saliva. Y, alzando los ojos al cielo, suspiró y le dijo: "Effatà!", Es decir: "ábrete!" Entonces se le abrieron las orejas y se le soltó el trabazón de la lengua y hablaba normalmente.

Y les mandó que no lo dijeran a nadie. Pero cuanto más se lo ordenaba más lo proclamaban. Y en el colmo de la admiración decían: "Todo lo ha hecho bien: hace que los sordos oigan y que los mudos hablen."

Resurrección de Lázaro (Jo 11, 17-44)

A su llegada, Jesús se encontró con que ya hacía cuatro días que Lázaro estaba muerto ....

Marta dijo a Jesús: "Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. Pero incluso ahora, estoy segura que Dios te concederá cualquier cosa que le pidas."

Le dijo Jesús: "Tu hermano resucitará." Marta le dice: "Ya sé que resucitará en la resurrección del último día." Le dijo Jesús: "Yo soy la resurrección y la vida; quien cree en mí, aunque muera, vivirá. Todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Lo crees, esto ?".....

Cuando María llegó donde estaba Jesús y lo vio, se lanzó a sus pies y le dijo: "Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto." Jesús, al verla llorar, y que los judíos que la acompañaban también lloraban, se conmovió profundamente y conturbado preguntó: "¿Dónde lo habéis puesto?" Le dicen: "Señor, ven a verlo." Jesús lloró.

Los judíos entonces decían: "Mirad cómo le quería." Pero algunos dijeron: "Él, que abrió los ojos del ciego, ¿no podía evitar que este muriera?"

Jesús, conmovido otra vez, llegó al sepulcro. Era una cueva tapada con una losa. Jesús dijo: "Retirad la losa." Marta, la hermana del difunto, le dijo: "Señor, ya huele, porque hace cuatro días que está muerto."

Jesús le dice: "No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?" Entonces quitaron la losa, y Jesús elevó los ojos al cielo y dijo: "Padre te doy gracias porque me has escuchado. Yo sé que siempre me escuchas, pero lo digo por la gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado.

"Después de esto, gritó fuerte: "Lázaro, sal fuera!" Entonces, el difunto salió fuera, atado de pies y manos con vendas y la cara envuelta con un sudario. Jesús les dijo: "desatadle para que ande"


PARA REFLEXIONAR:

Paralíticos, ciegos, sordos y mudos... ante la injusticia, la desigualdad, la violencia, el sufrimiento de los más débiles....
Pidamos al Señor, que nos haga levantar de nuestra camilla de la comodidad y del egoísmo y nos dé luz para ver el hermano, oído para escucharlo y palabras para consolarlo.....

¿Qué es un milagro?
Un hecho o un acontecimiento extraordinario, perceptible por los sentidos humanos, producido en un contexto religioso en el que Dios actúa y los beneficiados se abren a Dios por la fe. La posibilidad del milagro, para el creyente, quiere decir que Dios, libre ante lo que ha creado, puede producir una acción de amor y misericordia que anticipe, en la historia, su Reino. Este hecho o evento, el creyente cree que es posible, aunque es totalmente gratuito, imprevisible y no manipulable. (Esta es la diferencia entre milagro y magia).
(Mn.Rovira Belloso. "¿Quién es Jesús de Nazaret")

Nicodemo dialogando con Jesús: "Rabí, sabemos que eres un maestro enviado por Dios, porque nadie podría hacer estas señales prodigiosas que tú haces, si Dios no estuviera con él" (Jo 3,2)

El significado de los milagros

Jesús de Nazaret es, en tanto que personificación del Reino de Dios, el paso de frontera capaz de establecer una comunicación entre Dios y el mundo de los hombres. La Encarnación del Verbo de Dios traspasa la frontera entre cielo y tierra y significa el hecho admirable de la entrada de Dios en el ámbito de la corporalidad y el cosmos.

Jesús enviado por el Padre significa que el Reino de Dios se anticipa en nuestro mundo. Incluso el cosmos entero queda salpicado por la vida divina. La presencia anticipada del Reino de Dios en nuestro mundo equivale a una ráfaga de vida eterna allí donde Jesús se hace presente y actúa.

Hay un punto, y es Cristo, donde la frontera entre cielo y tierra se ha podido hacer practicable de manera gratuita y extraordinaria. Dándose la posibilidad real de los milagros, como estallidos del Reino de Dios, a partir de la persona de Jesucristo.
(Mn.Rovira Belloso. "¿Quién es Jesús de Nazaret")

Los signos realizados por Jesús testimonian que el Padre le ha enviado. Invitan a creer en él. A quienes se dirigen a él con fe, les concede lo que piden. Libra a algunos hombres de los males terrenales, pero no ha venido a suprimir todos los males de este mundo, sino a liberar a los hombres de la esclavitud más grave, la del pecado. (Catecismo 547-550).

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