EXPOSICIÓN:
El BIG BANG
Las últimas teorías sobre el Universo dicen que hace unos 14.000 millones de años se produjo una "explosión inicial" y que de la nada, o de una concentración inicial de energía y materia, se comenzaron a expandir las galaxias, con sus estrellas, sus agujeros negros, los espacios sin materia, alejándose cada vez más unos de otros estos cuerpos estelares. Como cuando se tira una piedra a un estanque y las ondas de agua se van alejando cada vez más del punto de impacto.
EL SISTEMA SOLAR
Uno de estos cuerpos estelares es el Sol, formando parte de los 100.000 millones de estrellas que conforman la galaxia llamada "Vía Láctea". La materia que giraba alrededor del Sol se fue concentrando hasta constituir los planetas del sistema solar, que giran a su alrededor debido a la fuerza de gravedad.
EL PLANETA TIERRA
Al planeta tierra se le asigna una antigüedad de 4,500 millones de años. Concentración de minerales y gases, en estado incandescente, atmósfera irrespirable al principio…, volcanes…. y agua, en alguno de sus estados.
INICIO DE LA VIDA
Se cree que las primeras formas de vida en estado primigenio y microscópico datan de hace 3.000 millones de años. Los biólogos encuentran en las rocas manifestaciones de vida en forma de algas e invertebrados marinos que datan de 600 millones de años. Hace 500 millones de años aparecen los peces. Hace 400 millones de años las plantas empiezan a poblar la tierra firme. Anfibios y reptiles salen del agua y pueblan la tierra.
Hace 60 millones de años hubo una extinción masiva de especies, los dinosaurios entre ellas, quizás debido a la caída de un meteorito (en la península del Yucatán).
APARICIÓN DEL HOMBRE
Entre 1,5 millones de años y 1 millón de años datan los primeros restos arqueológicos humanos. Primeros homínidos, el hombre de Neandertal y el hombre de Cromagnon fueron poblando la tierra, extinguiéndose los primeros.
Nuestros ancestros vivieron 4 grandes glaciaciones en el paleolítico, vivían en cuevas y eran cazadores (el paleolítico llega hasta 10.000 años a C.). Neolítico (hasta 3.000 años a C -clima más templado, vida sedentaria en tribus, inicio de la agricultura-). Edad del Cobre (hasta 2.500 a C). Edad del Bronce (hasta 1.000 a C - Mejora el uso de los metales, civilización egipcia, Pueblo de Israel-). Edad del Hierro (hasta 500 a C - Íberos en la península, Imperios Fenicio, Griego y Romano).
PARA PENSAR:
¿CUAL ES EL ORIGEN DEL UNIVERSO?
Se ha apuntado como se formó, pero no su origen. Este impulso inicial, los cristianos creemos que es obra de Dios.
¿CUAL ES EL ORIGEN DE LA VIDA?
Parece que la combinación de un "caldo" marino de hidrógeno, agua, amoniaco y metano, junto con las reacciones provocadas por descargas eléctricas y la acción ultravioleta del sol sobre la atmósfera terrestre fueron causas determinantes para que se constituyeran los primeros compuestos orgánicos generadores de vida, entre ellos los aminoácidos.
Como antes, se han apuntado razones sobre el cómo ...... Quien .......
de nuevo creemos los cristianos que Dios es el origen de la vida.
CIENCIA vs RELIGIÓN
Existe la corriente de pensamiento de que conforme el hombre avanza en los conocimientos científicos la religión va perdiendo "pistonada". Los avances científicos siempre explican el cómo, pero no explican las causas primigenias.
Hay eminentes científicos "ateos o agnósticos" y eminentes científicos "creyentes" de todas las religiones.
ROLEX vs ADN
Al ver un reloj "Rolex" o cualquier otra máquina (una pianola que toca una melodía), podemos admirar sus piezas, su perfección, su sonido. De natural pensamos que un Rolex no ha salido de la nada como una seta, pensamos en el relojero. Si es un coche, pensamos en el ingeniero. Si es una melodía en el músico que la creó, etc ....
No es el ADN, ahora que sabemos más de su composición, una maquinaria mucho más compleja que un Rolex, o un ferrari .... Haciendo el paralelismo con los anterior ejemplos, quien es el "ingeniero" o "relojero" de esta creación?. De nuevo los cristianos le llamamos Dios.
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Curiosamente este curso me han encomendado impartir a los alumnos de 1º de bachillerato la asignatura "Ciències per al món contemporani" (Ciencias para el mundo contemporáneo). Su primer capítulo lleva por título "L'origen de l'univers i de la vida" (El origen del universo y de la vida).
ResponderEliminarLos que me conocen saben que no es estrictamente mi área ya que soy profesor de física y química. Pero, bueno, de alguna forma sí. La cuestión es que me he preparado en profundidad para explicar este primer tema de la asignatura.
Quién fue el iniciador de la teoría del “Big Bang” (acerca del origen del universo) es dudoso. Albert Einstein sugirió algo así allá por el año 1917. Einstein se equivocó al afirmar que el universo no cambiaba de forma con el tiempo (universo en equilibrio). Por este motivo es dudoso que él hablase de una “Gran Explosión”. No son pocos los científicos que afirman que la teoría del Big Bang, la Gran Explosión, originalmente fue formulada por el belga Georges Lemaître.
El astrónomo (ese el el título que el libro de texto le da, astrónomo) G. E. Lemaître se atrevió a corregir a Einstein afirmando que el universo está en expansión como consecuencia de una gran explosión a partir de lo que él denomino “huevo cósmico” o “átomo primitivo” (año 1927). Lemaître, sin embargo, no poseía ninguna evidencia científica para reforzar su teoría.
Edwin Hubble, en 1929 daba la razón a Lemaître afirmando, mediante pruebas científicas, que el universo estaba en expansión.
En 1931, en California, coinciden Hubble, Lemaître y Einstein. La reunión fue muy interesante y provechosa. Einstein no tuvo ningún inconveniente en reconocer que se había equivocado (a favor de Lemaître). “En esta reunión se establecieron las bases de la cosmología moderna” (Stephen William Hawking).
Lo que sólo algunos saben es que George Lemaître, por encima de físico, fue sacerdote católico (recomiendo leer su biografía).
Dos frases literales (según traducción)
“(1975) El Papa –Pablo VI– me dio una medalla por mi trabajo en la demostración de la teoría del Bib Bang “(Stephen William Hawking)
“(1981) Había un nuevo Papa –Juan Pablo II– que nos dijo que estudiar el universo después del Big Bang estaba muy bien; pero que no teníamos que investigar el Big Bang en sí porque ese fue el momento de la Creación y la obra de Dios” (Stephen William Hawking)
Se sabe muchas cosas a partir del “Big Bang”. Pero nada se sabe de lo que era, o existía, o estaba, antes de el instante 10-43 segundos. ¿Quizás Juan Pablo II se refería a lo que aconteció antes de ese instante? Alguno podría decir “entre 0 y 10-43 segundos, ¿qué puede ocurrir?”. Si lo miramos con los “relojes” de ahora (un rolex, por ejemplo), bien poca cosa. Pero si consideramos la teoría de la relatividad de Einstein, el intervalo de tiempo “0 - 10-43“ podría ser una eternidad en el instante inicial.
CONCLUSIONES:
Podríamos considerar al padre Lemaître como el “padre” de la teoría del Big Bang.
Si el vicario de Cristo en la tierra concede una medalla a un científico por investigar acerca del origen del universo, en el ámbito de la teoría del Big Bang, es que la Iglesia no se opone a ese tipo de investigaciones, más bien las promueve.
El verdadero científico busca y se afana por encontrar la verdad. Inevitablemente, si así lo hace, se ha de encontrar con Dios.
La verdadera ciencia jamás entra en contradicción con las verdades de fe.
La ciencia y la fe tienen un mismo objetivo: la Verdad.
Aclaración: 10-43 segundos = 0,0000000000000000000000000000000000000000001 segundos. Por lo visto, no aparece como superíndice (-43)
ResponderEliminarRespecto de la vida.
ResponderEliminarLe propuse a mis alumnos el siguiente caso.
Un científico, supermoderno y con la tecnología más avanzada, analiza cuantitativamente un saltamontes. Cuando intenta introducirlo en su “analizador” pega un salto y escapa. Sin embargo, consigue capturalo e inicia el proceso. El resultado % de carbono, % de hidrógeno, % de oxígeno, % de nitrógeno, etc, etc.
Una vez tiene los porcentajes, decide repetir el experimento para asegurarse bien. Pero está vez no quiere correr el riesgo de que se le vuelva a escapar y le pega un garrotazo y lo mata. En estas condiciones repite la experiencia y obtiene exactamente los mismos porcentajes.
La pregunta que le hago a mis alumnos es ¿qué diferencia hay en el saltamontes antes y después del “garrotazo”? El análisis porcentual es idéntico ¿Entonces? Después de mirarse unos a otros, uno de mis alumnos se atreve a decirme: “antes estaba vivo y después muerto; la diferencia es la vida”
La siguiente pregunta que les hice es previsible: “Entonces, ¿en qué parte del saltamontes está la vida?” “La vida está en todo el saltamontes… pero no es material”, me respondió uno de ellos después de un prolongado silencio.
Después del Big Bang todo está ya en “marcha”. No de una forma caótica. Dios sigue ahí. El universo evoluciona. Evoluciona también la materia; nada que objetar. Pero la vida “no es material”, según respondió mi alumno. Entonces, si no es material, ¿de donde sale?
“Entonces Yahveh Dios formó al hombre con polvo del suelo, e insufló en sus narices aliento de vida, y resultó el hombre un ser viviente” (Gen 2, 7)
Meditando éste primer tema sobre la creación, y dentro de las limitaciones propias de los que no somos "científicos", ni "teólogos", recordaba las palabras de un sacerdote amigo, "PARA QUIEN CREE, TENGO MIL RAZONES;PARA QUIÉN NO CREE, NO TENGO NINGUNA"
ResponderEliminarAnte la obsevación limpia y sincera del universo, sólo cabe decir: GRACIAS PADRE.
Buenas. Cuando leo acerca de este tema del origen del universo pienso precisamente en quién formó ese primer átomo de la nada, y sólo pudo ser Dios.
ResponderEliminarMe llama la atención las citas de Hawkings. Este científico dijo en Santiago de Compostela hace un año lo siguiente: "la ciencia está dando cada vez más respuestas a preguntas que solían ser dominio de la religión" y ha expresado su confianza en que los progresos científicos permitan "proveer pronto una respuesta definitiva a cómo empezó el Universo".
Javier apunta en su comentario el error de este científico ateo. Dice Javier: La Biblia no contesta a la pregunta "¿cómo se formó el Universo?"; eso le corresponde a la ciencia; la Biblia responde al quién y al porqué.
Los cristianos creemos que Dios creó el universo (y al ser humano) y los creó porque "esto era bueno" (Gn), por amor. No nos estorba el cómo lo hizo, o a qué leyes naturales recurrió. QUe lo averigüe la ciencia. Pero es curioso el afán rabioso de algunos científicos por anular al Creador.
José Carlos
Yo no se de física ni de química, por no saber, no se ni de que va la serie que lleva ese nombre y que los adolescentes ven con tantas ganas.
ResponderEliminarLo que mi razón si que alcanza a decirme, que ha de haber un ser no creado, que nada ni nadie le haya creado a él, y que él tenga la capacidad para crear. Ese ser para mi es Dios.
¿El como?, pues aquellas personas con capacidad suficiente me lo expliquen. Y yo como he hecho ahora me informare.
"Lo que sólo algunos saben es que George Lemaître, por encima de físico, fue sacerdote católico (recomiendo leer su biografía)."
Este dato no lo sabia y para mi es bastante relevante, yo hasta este momento era del grupo que no lo sabian.
Gracias.
De la Creación, nos dice más la Palabra de Dios, que los científicos, a pesar de la brevedad de sus 2 relatos narrados en el libro del Génesis.
ResponderEliminarNos dice más, cara a lo que nos interesa como personas: descubrir nuestra identidad, el sentido, la intención. Respuestas más existenciales que científicas, aunque estas últimas también sean importantes (el saber no ocupa lugar).
La Creación visible esconde mucho más que datos materiales, nos abre a una hermosa trascendencia y verdad, que estamos llamados a observar, para descubrir una plenitud propuesta por Dios mismo: vivir en su amor.
Lo que nos pueda decir la ciencia (el como de las cosas) impactará en nuestra inteligencia, como lo hace contemplar tantas maravillas como nos rodean, comenzando por la complejidad de todo nuestro ser y sus maravillosas dimensiones. Ya que el hombre, es lo que Dios a manifestado como destinatario de la Creación de modo especial (después de Cristo, claro está).
En cambio, en dichos relatos bíblicos, encontramos a su Autor y su bondadosa intención.
En el primer relato de carácter objetivo, nos dice Dios mismo que nos hizo a su imagen y semejanza. Importantísimo comprenderse teológicamente y no casualmente.
El segundo relato de carácter subjetivo, nos dice de las propias experiencias del primer hombre. Lo que descubre en su soledad (una llamada a la comunión), se reconoce distinto del reino animal y resto de seres vivos (es superior a ellos, les da el nombre) y diferente de Dios (es inferior), pero capacitado para relacionarse con Su Creador, que lo crea bueno, libre, inteligente, inmortal, etc. Todo esto lo explicó maravillosamente bien Juan Pablo II y hoy cualquiera de nosotros puede constatar en carne propia, esas mismas experiencias originarias.
La complejidad, perfección y belleza de la Creación, entre otras muchas constataciones, interpelan nuestra inteligencia, conciencia y razón. Nosotros cuestionamos al universo, pero quien es cuestionado e interpelado ante tantas maravillas, realmente somos nosotros.
Las 5 vías de Santo Tomás ayudan a un reflexión muy sensata y razonable, ya que descarta con argumentos, la imposibilidad de que la casualidad sea lo que explica todo.
La Creación es un don de Dios a cada uno de nosotros, donde muestra su amor y sabiduría infinita. Y también nos coloca a cada uno de nosotros como un don para el mundo (únicos e irrepetibles). Si así de maravillosa e impresionante es la Creación del mundo visible ¿cómo será el invisible? Las maravillas de la Creación son signo y umbral de lo que nos aguarda: La COMUNIÓN ETERNA CON DIOS.
El Creador se expresa en su Obra. Que importante pues, descubrir sus designios.
La verdad y el bien que existe en todo, nos informa del infinito amor que Dios nos tiene.
Frente al caos inicial…, el orden del cosmos (universo ordenado) creado por el Ser Necesario.
Un abrazo.
Alguien dijo que Dios es grande en las cosas pequeñas e inmenso en las grandes.
ResponderEliminarMiquel, un hermano de la GP, nos dio una direccion de JRC -jovenes por el reino de Cristo- (jrcfrc.org), donde estan gravadas las conferencias de sus encuentros. Dos de ellas eran de P. Carreira, experto fisico y astronomo conocido por muchos. Las estuve escuchando con mi mp3.Relamente son interesantes. En ninguna de ellas se nombra a Dios directamente, pero se evidencia su intervencion en la obra creadora. No es posible hablar de casualidad y azar sino de una inteligencia superior ordenadora de todas las cosas. Si se busca, encuentras, aunque no hay peor ciego que el que no quiere ver.
¿Y si Dios no ha sido? ¿Quien ha sido?. Llamale como quieras y amale como te de la gana porque El esta ahi porque tu estas aqui, aunque sea por la simple posibilidad de leer esta lineas, de conectarte por internet con nosotros, por medio de la red, cuando desde hace siglos Dios esta conectado con nosotros por medio del Amor.
Saludos
Joaquin
Respecto altema de la creación, desde un punto de vista pedagógico, me viene a la cabeza esta pregunta: ¿por qué la "Iglesia" (y me refiero a los católicos/as, religiosos/as, creyentes, sacerdotes, padres, madres, profesores,...)durante mucho tiempo ha explicado la creación basándose en los dos relatos de la Biblia, y entendiéndolos como dos realidades que existieron? Al menos a mi así me lo enseñaron en la escuela.
ResponderEliminarUn saludo.
Samuel
Yo Me acuerdo de unos Ejercicios Espirituales hace ya bastantes años en los que se comentó que "un insecto no tiene capacidad de SORPRENDERSE ni DESCUBRIR la grandeza del SER (persona o animal) sobre el cual está posado" A esta capacidad de "SORPRESA" y "DESCUBRIMIENTO" sin duda que nos ayuda el estudio. Pero, sin duda, es Dios quien nos recuerda que estamos "posados" sobre Él. Me sorprende cada día con su amor de Padre. Se llega a ello con la humildad del reconocimiento de la propia pequeñez y el descubrimiento alegre de la grandeza de Dios. "...que no está lejos de cada uno de nosotros, porque en Él vivimos y nos movemos y existimos" (Act. 17, 27-28)
ResponderEliminarQuerido Samuel.
ResponderEliminarMe parece muy bien tu pregunta, porque nos ayuda a reflexionar acerca de nuestra fe y a profundizar en cuestiones tan importantes para nosotros como la que nos ocupa (pues son los fundamentos de nuestro pensar, sentir y vivir).
Se me ocurren varias cosas a bote pronto, si esta cuestión surgiera con los amigos tomando un café:
¿Qué podríamos enseñar los cristianos en esta materia, de no existir el libro del Génesis en la Biblia y los distintos pasajes que a ella se refieren? (Ex. 20: 11; Sal. 8:3-6; Mt. 9:4-5; Mr. 10:6-7; Lc. 3:38; Ro. 5:12-21; 1 Co. " 11:9; 15:22, 45; 1 Ti. 2:13-14).
Nuestra contribución sería una especulación más a las ya existentes(que demuestran que el hombre no tiene información cierta acerca de su origen).
La naturaleza no revela la creación del hombre.
Pero es lógico que el hombre busque la forma de entender su propio origen tanto como el origen de todas las cosas existentes.
Si aceptamos que hemos sido creados por Dios, es razonable esperar que Él revelaría los hechos esenciales acerca de la creación del hombre en la Biblia, que es Sú Palabra.
Dios, que nos ha creado con una intención clara, no puede dejarnos a oscuras.
Dios, en la Biblia, ilumina y responde a los interrogantes del hombre. Además nos ha revelado en Jesús su naturaleza, nos ha comunicado su Intimidad y su Misterio: La Santísima Trinidad. Es ese misterio de amor, el origen y meta de todo y por supuesto, del hombre.
La verdad y el amor de este mensaje ha penetrado siempre en el corazón de los hombres humildes, de los bautizados, de los santos, etc y el hecho que comentas, de que todos los miembros de la Iglesia transmiten la enseñanza de la creación del mismo modo, demuestra algo muy bello, como es la unidad en la verdad y la confianza plena en el mensaje revelado, su origen y su meta. Y eso es tremendamente pedagójico.
Enseñar desde la Palabra de Dios siempre será un pilar seguro y firme, para edificar nuestra vida.
El fundamento de nuestra existencia es el amor de Dios y eso no lo podrá contener ni explicar la ciencia, porque no es su ámbito.
Quede claro que la ciencia es necesaria, pero su terreno es la materia, y resulta que el hombre además de cuerpo, es espíritu.
Los católicos al educar, enseñamos y transmitimos algo más que datos. En el corazón del mensaje que comunicamos, está el amor, la verdad,el bien...no nos mueve otra intención que la de anunciar que el origen de todo y el nuestro propio, es un Acto de Amor, un Acto creador de Dios. Sólo Él, es digno de fe.
Quizá a alguno le parezca poco científico, pero me pregunto ¿podemos reducir el hombre a una definición técnica? Pienso que no. El hombre más que un problema, es un misterio; capaz de interioridad y de trascendencia, su ser no se agota en su naturaleza, pues Dios nos ha comunicado la Suya y esto nos hace infinitamente especiales.
Si nuestro origen es el Amor de Dios, es nuestra fe en Él y no la ciencia, la mejor luz para comprendernos.
Espero haberte ayudado.
Un abrazo.
La ciencia y el relato bíblico están de acuerdo en los puntos fundamentales, en especial estos tres:
ResponderEliminara) El mundo no es eterno.
b) El mundo fue formado sucesivamente.
c) Aparecieron primero los seres inferiores y después los superiores; primero la materia, luego las plantas, los animales y por fin el hombre.
Realizada la Creación, Dios no abandona su criatura a sí misma. No solo le da el ser y el existir, sino que la mantiene a cada instante en el ser, le da el obrar y la lleva a su término. Reconocer esta dependencia completa con respecto al Creador es fuente de sabiduría y de libertad, de gozo y de confianza. (CIC #301)
Dios crea y sostiene. No es un acto realizado en el pasado. Cada instante de nuestra vida es sostenido y renovado por SU AMOR.
Esto me recuerda al misterio de la Eucaristía.
Se actualiza cada día frente a nosotros el don de Cristo.
Bona tarda (i gràcies Jaume),
ResponderEliminarse pedía la aportación de “hermanos de ciencias”. Yo no conozco en profundidad este tema aunque me gusta oír hablar de él. Leyendo la catequesis me vienen a la mente algunos comentarios. Los expondré de manera breve.
Cuando se habla de la aparición del hombre en la cronología de la creación, yo intento superponerle el relato del Génesis. En algún momento Dios “pone” alma a un ser de su creación. Dicho de otro modo, a partir de cierto instante se puede hablar de hombre “a imagen y semejanza de Dios”.
El Big Bang es el modelo comúnmente aceptado sobre la formación del universo. En el futuro y con los avances de la ciencia, quizás éste sea más concreto y responda a algunos interrogantes. Personalmente, me llama la atención cuando se habla de antimateria y agujeros negros. Además de la dimensión tiempo, entendido como una cuarta dimensión.
Solamente quiero manifestar que es complicado para la mayoría entender el modelo del Big Bang. De manera que se suele explicar de manera simplificada o parcial para que sea más o menos comprensible. De igual modo ocurre con la explicación del relato de Adán y Eva a un niño de Primera Comunión. O cuando nos explicaban el modelo del átomo en la antigua EGB.
Alguna vez he escuchado hablar de los teoría creacionista (los creacionistas) y el diseño inteligente. Es popular en los Estados Unidos entre los cristianos protestantes. En cierta manera niega la teoría de la evolución de Darwin. Desconozco sus postulados. La cito solamente porque algunas veces es un argumento utilizado para desacreditar a la Iglesia.
Un abrazo
Josep
Pienso que este pasaje del libro de la Sabiduría, leído ayer viernes en La Iglesia (13 de nov.) es más que esclarecedor. Por las obras podemos llegar a intuir y descubrir a SU AUTOR.
ResponderEliminarAl escucherlo me acordé del tema tratado en el blog y creo que insertarlo embellecerá su actual contenido.
Sabiduría, 13
1. Sí, vanos por naturaleza todos los hombres en quienes había ignorancia de Dios y no fueron capaces de conocer por las cosas buenas que se ven a Aquél que es, ni, atendiendo a las obras, reconocieron al Artífice;
2. sino que al fuego, al viento, al aire ligero, a la bóveda estrellada, al agua impetuosa o a las lumbreras del cielo los consideraron como dioses, señores del mundo.
3. Que si, cautivados por su belleza, los tomaron por dioses, sepan cuánto les aventaja el Señor de éstos, pues fue el Autor mismo de la belleza quien los creó.
4. Y si fue su poder y eficiencia lo que les dejó sobrecogidos, deduzcan de ahí cuánto más poderoso es Aquel que los hizo;
5. pues de la grandeza y hermosura de las criaturas se llega, por analogía, a contemplar a su Autor.
6. Con todo, no merecen éstos tan grave reprensión, pues tal vez caminan desorientados buscando a Dios y queriéndole hallar.
7. Como viven entre sus obras, se esfuerzan por conocerlas, y se dejan seducir por lo que ven. ¡Tan bellas se presentan a los ojos!
8. Pero, por otra parte, tampoco son éstos excusables;
9. pues si llegaron a adquirir tanta ciencia que les capacitó para indagar el mundo, ¿cómo no llegaron primero a descubrir a su Señor?
Palabra de Dios